Cinco acciones para forjar la felicidad en el trabajo
Aunque la felicidad es momentánea, es vital que los empleados tomen decisiones que los ayuden a forjarla diariamente desde su trinchera.
La felicidad es un elemento clave en todos los aspectos de la vida. Y aunque es un sentimiento momentáneo, es necesario que los colaboradores lo tengan todos los días, ya que de él dependen la motivación y, por ende, los resultados.
Forjar la felicidad puede resultar retador, sobre todo en el mundo laboral porque hay varios factores que influyen como el ambiente laboral, el liderazgo y las oportunidades de crecimiento y desarrollo profesional.
Adicionalmente, las empresas y los jefes tienen que ser conscientes de que la felicidad en el trabajo y la vida personal son diferentes, indica Bizneo, es decir, “no hay que confundir la felicidad en el trabajo con la situación anímica personal”.
En ese sentido, las organizaciones tienen que respetar el espacio personal de los trabajadores, pero también darles herramientas para forjar la felicidad en las empresas, ya que es algo que les compete y, hasta cierto punto, pueden inferir.
Emprendiendo historias expone que la felicidad es una decisión, por lo cual recomienda cinco acciones que los colaboradores pueden ejecutar para construirla:
- Aceptar que hay cosas que no se pueden controlar. Esto implica estar informados y actualizados para tomar precauciones, pero igual para comprender que hay situaciones o circunstancias incontrolables.
- No compararse con los demás. Cada persona tiene cualidades y defectos y eso hace que cada individuo sea singular. En vez de enfocarse en lo que uno no tiene, la clave es aprovechar los atributos y festejarlos.
- Escoger las batallas con inteligencia. La inteligencia emocional es necesaria para todo porque habla del conocimiento que una persona tiene de sí misma, y por ello repercute en la felicidad. Esto permite que la gente analice y con consciencia tome decisiones incluso para debatir, ya que a veces no es el mejor escenario para hacerlo.
- Mantenerse fiel a uno mismo. En todos los entornos, la gente está ante el desafío de dejarse llevar por los demás, perdiendo su esencia. En el trabajo, lo vital es actuar y expresarse con congruencia, respetando los valores y principios personales.
- No tener miedo de mostrar debilidades y temores. Por ley humana, todas las personas cometen errores, se equivocan y fallan. Pero eso no significa que el temor debe dominar; por el contrario, mostrarse humano es de los valores más excepcionales, ya que habla de la humildad y autenticidad de una persona, que son vitales para el aprendizaje y crecimiento continuo.
