Los beneficios de la tecnología son innumerables; en términos de negocios, uno de los más relevantes es el posicionamiento de la marca. Pero, así como ofrece múltiples ventajas, igual presenta riesgos, como la filtración de datos que implica un alto costo, no sólo cuantitativo, sino cualitativo y cuyo daño es probablemente incalculable.

Innovar e invertir en el bienestar de los datos es esencial para cualquier compañía, no importa que sea grande o pequeña, ya que todas son un blanco para los ciberdelincuentes, quienes se fijan en el valor y potencial de la información, sobre todo en la actualidad que está regida por la tecnología, al ser un medio de información, comunicación y entretenimiento.

Si hablamos de cifras, en Latinoamérica, la estimación del costo promedio de la filtración de datos fue de 1.68 millones de dólares en 2020, de acuerdo con un estudio del Institute for Business Value (IBM). Estos números son alarmantes, así como el tiempo para identificar y contener esta situación: 328 días.

Comienzo de los daños

Lo más destacable es que las compañías invierten casi un año para restablecerse, pero eso no significa que se recuperará lo más importante: la confianza de los clientes, la cual puede desaparecer inmediatamente y sin dar marcha atrás. Y es justamente ahí donde surge el principal daño cualitativo.

De acuerdo con estudios, el 48% de los clientes ha finiquitado su relación con las empresas cuando hay filtración de datos, ya que el principal objetivo de los ciberdelincuentes es obtener información personal y confidencial como tarjetas de crédito y números de seguridad social. En este caso, es conveniente ponerse en los zapatos de los usuarios porque recuperar esta información es tardado y tedioso. 

Por otra parte, estos inconvenientes también atentan contra la propiedad intelectual, que el Foro Mundial de la Propiedad Intelectual define como “la creación de la mente como invenciones, obras literarias y artísticas, así como símbolos, nombres e imágenes utilizadas en el comercio”. En pocas palabras, es el todo de una empresa, que es justamente lo que la hace única y da ventaja sobre la competencia. 

Medidas a considerar

1. Educación continua. Este tipo de robos se puede suscitar en cualquier momento, razón por la que los equipos de trabajo tienen que estar actualizados. Por lo general, las empresas destinan una sesión anual para brindar este tipo de información, de modo que es necesario implementar sesiones periódicas.
2. Privacidad por diseño. No es una herramienta nueva, ya que se desarrolló en la década de los noventas; sin embargo, su enfoque está altamente calificado porque en todo el proceso de ingeniería se exige privacidad.
3. Supervisión y honestidad. Por ciberseguridad se entiende una infraestructura tecnológica, la cual corre a manos de personas, las cuales pueden tener una visión cerrada al estar trabajando constantemente en el mismo proyecto; por lo tanto, es conveniente involucrar consultores externos que analicen y validen o detecten áreas para mejorar.