

Este entorno expone a los empleados a peligros psicosociales, además de que la carga laboral es alta y las recompensas son malas.
El ambiente de trabajo dice mucho de una empresa porque habla de sus valores, objetivos, cultura organizacional y estándares de la felicidad laboral. En muchos casos, sobre todo cuando se está empezando a laborar un lugar, las organizaciones procuran mostrar una imagen falsa para ocultar uno de los principales males del sector empresarial: un entorno tóxico.
En todas las empresas surgen inconvenientes y crisis, y un ejemplo a nivel mundial fueron todas las complicaciones a causa de la pandemia por Covid-19. También es natural que haya diferencias entre los colaboradores, ya que no todos tendrán las mismas opiniones en un tema.
De modo que es importante no confundir esas situaciones con un clima laboral tóxico que, es aquel “en el que los trabajadores están expuestos a peligros psicosociales”, explica Aditya Jain, profesor asociado de Gestión de Recursos Humanos en la Escuela de Negocios de la Universidad de Nottingham.
El especialista en estrés, bienestar y salud mental en el lugar de trabajo agrega que una cultura laboral tóxica se da cuando el apoyo organizacional es mínimo o nulo, además de que hay “malas relaciones interpersonales, alta carga de trabajo, falta de autonomía, malas recompensas y falta de seguridad laboral”.
¡Alerta roja!
Para identificar si un centro de trabajo es nocivo, lo principal es analizar cómo es el ritmo de trabajo, qué trato reciben los colaboradores y cómo se comporta el recurso humano, partiendo desde la dirección hasta la operación. Y los 10 puntos clave que delatan esa situación, de acuerdo con OCCMundial, Sodexo y Psicología y Mente, son los siguientes: