En todas las empresas, el recurso más valioso es y será siempre los colaboradores. Nada puede reemplazar el talento, compromiso, conocimientos y habilidades (tanto duras como blandas) de las personas que dedican su día a día a la realización de actividades que fortalecen y benefician a una organización.
Sin embargo, es muy importante considerar que la formación de equipos de trabajo debe estar basada en los principios de diversidad e inclusión. De esta forma, no sólo se contribuye a reducir las brechas de desigualdad social por distintos factores, como el género o las preferencias sexuales, también ayuda a crear empresas más fuertes, con diversidad de ideas y conocimientos.
Hoy en día, la inclusión y la diversidad no son sólo parte de las políticas de una empresa para cumplir con ciertas reglas, leyes o normas oficiales. Por el contrario, estas prácticas contribuyen a mejorar la imagen de la organización, tanto al interior como al exterior, además de aumentar los niveles de productividad.
Si tienes dudas sobre cómo impulsar la diversidad y la inclusión en tu empresa, te compartimos los siguientes puntos básicos:
El cambio en la cultura empresarial es indispensable para fomentar la diversidad y la inclusión. Según la empresa Cloverpop, los equipos diversos toman mejores decisiones en 87% de las veces, en comparación con el 58% que obtienen cuando los equipos están integrados únicamente por hombres.
Esta última cifra aumenta al 73% cuando existe diversidad de género, y al 80% cuando hay diversidad de edad y género. Así que, como ves, no sólo se trata de un tema de imagen, también de elevar y mejorar los resultados de las organizaciones.