El liderazgo como impulsor del bienestar de la organización
Por: Redacción Recursos Humanos TV
En recientes años el mundo laboral ha estado experimentando un cúmulo de cambios a nivel organizacional, no solo a nivel local, también a nivel global, que han contribuido en la transformación y desarrollo de nuestro entorno.
En el mundo de la transformación digital han cambiado las estrategias, los métodos de selección de personal, se ha modificado el contacto con el cliente y los procesos internos de la empresa se han mimetizado entre humanos y tecnología. No es poco el avance que se ha tenido en un lapso de 5 años
Todo este contexto ha desembocado en nuevos desafíos para CEOs y directivos. Uno de lo más importantes es el aprendizaje del liderazgo para establecer programas de compensaciones y bienestar para los trabajadores.
¿Cómo lograr que líderes se involucren de manera correcta con temas que beneficien no solo económicamente, sino humanamente, a los trabajadores? Ese es el gran reto de la era digital, el combinar la parte humana con la tecnología, a la par en grado de importancia.
De acuerdo con la consultora McKinsey, los líderes han alcanzado un mejor rendimiento en el ámbito de la humanización en plena era tecnológica, al aplicar de manera consciente el rendimiento organizacional con comportamientos de inteligencia emocional y consolidación empresarial efectiva.
Los líderes de actualidad requieren de acciones diarias que brinden experiencias y comportamientos de vanguardia acordes con la visión de la organización. La mejora en las habilidades comunicativas se ha ido adecuando al lenguaje no verbal y a la retroalimentación de calidad. Estos elementos ayudan a los líderes a enviar mensajes objetivos y claros a los colaboradores de todos los niveles.
Al tiempo que se establecen lazos fuertes con colaboradores, se brinda seguridad y se logra involucrar a los trabajadores en los procesos laborales diarios. Impulsar la inteligencia emocional protege a la base laboral para la resolución de conflictos y el cumplimiento de objetivos.
Los líderes enfrentan objetivos que se han abordado durante años. Las prácticas inclusivas fomentan a su vez un liderazgo inclusivo y, al mismo tiempo, se alinea la cultura organizacional, la diversidad, las políticas de inclusión y de género que mejoran constantemente los objetivos generales de la organización.
Los líderes que trabajan la empatía impactan en el ambiente laboral. De acuerdo a Catalyst, una organización sin fines de lucro, el comportamiento empático mejora la calidad de las relaciones y, por ende, la cultura organizacional mejora ampliamente en el sentido práctico.
Un líder es catalizador de información compleja y valiosa que desemboca en estrategias exitosas o en estrategias que ponen en riesgo los procesos de la empresa, el tener conocimientos globales, incluidas técnicas de compensación y bienestar laboral, construirá un liderazgo efectivo que impulsará el bienestar de los colaboradores y el éxito de la organización.
Un CEO es prácticamente el creador de una obra de arte o el destructor del trabajo de años, por ello los estándares siempre deben ser los más altos en cuanto a exigencia y desempeño en todos los aspectos.
Es fascinante el análisis de la perspectiva y construcción del liderazgo moderno con tendencia a la mejora de las relaciones humanas, en conjunto con skills tecnológicos. Las empresas modernas se construyen con humanidad y con digitalización constante, a la par.
El trabajar en un liderazgo para el bienestar y compensaciones de los trabajadores, es una de las tareas que dará mayor alcance a largo plazo para la construcción y crecimiento de una organización. Los CEOs tienen el futuro en sus manos, ¿lo construirán de manera efectiva, ética y profesional?.
