El liderazgo no es para todos. Cómo decir que no a un ascenso

El liderazgo no es para todos. Cómo decir que no a un ascenso

Dirigir a un equipo en una empresa no es tan fácil. Sin embargo, muchos empleados pueden llegar a aceptar el puesto aún cuando no se sienten listos, todo por temor a la presión social y el sentimiento de culpa que genera rechazar la oportunidad. Por eso aquí te decimos cómo puedes decir que no a un ascenso.

Según el sitio de Vogue es necesario hacer un trabajo de autoanálisis en el que puedas conocer las razones por las que no quieres aceptar el puesto, puede ser miedo, cuestiones familiares o simplemente por no querer salir de tu zona de confort.

Todas tus razones son válidas, y para ponerlas en práctica es necesario seguir algunas recomendaciones de los expertos:

  • Justifica tu respuesta

Según la psicóloga Patricia López es necesario saber responder por qué no quieres ese nuevo puesto, ya que muchas veces las personas llegan a dar explicaciones sin fundamento para evitar más preguntas. Pero a la larga esto puede hacerte sentir aún más culpable o confundido. Identifica qué es lo que tienes y qué es lo que deseas en verdad.

  • Demuestra compromiso con tu actual puesto y la empresa

Existen muchas razones por las que probablemente no quieras aceptar un nuevo puesto, puede que no te sientas listo para asumir nuevas responsabilidades, que te desenfocan de tu meta profesional o porque disfrutas mucho lo que haces.

Asume tus razones sin miedo y comunícalo a tu jefe con entusiasmo. Hazle saber que todavía tienes mucho que aportar en tu actual puesto, coméntale tus objetivos o hasta recomienda a alguien más si así lo crees.

  • No cierres las puertas al futuro

Por supuesto que te ofrezcan un ascenso es una gran oportunidad. Por ello no debes olvidar agradecerle a tu jefe por considerarte para el puesto ni tampoco cerrarte a la posibilidad de tomarlo en un futuro, porque “nuestra situación y valores irán cambiando a lo largo de la vida” comenta Amagoia Eizaguirre, fundadora de la empresa Habituatea.

No está mal decir que no a un ascenso si no te sientes listo. De hecho, es incluso más coherente rechazarlo antes de hacer un mal trabajo. Recuerda que tu bienestar siempre va por encima de cualquier empleo.

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