Autocrítica, enemiga del crecimiento profesional
Empresario asegura que “ser más amable contigo mismo, hará que sea mucho más fácil ser la mejor versión de ti”, lo cual es vital en todas las esferas de la vida.
Las exigencias personales, la presión por cumplir los objetivos y el perfeccionismo extremo pueden caer en la autocrítica, la cual puede llegar a convertirse en la enemiga del desarrollo y crecimiento personal y profesional, sobre todo cuando las personas se vuelven en sus propios juzgadores.
Manuel del Valle Borbolla, emprendedor y socio fundador de Amxco, explica que los colaboradores son más productivos cuando cuentan con respaldo y apoyo, en vez de cuando son criticados, juzgados y reprendidos.
“Podemos crecer y evolucionar mucho más cuando estamos rodeados de amor y apoyo. Lo mismo ocurre con el trato que nos damos a nosotros mismos”, destaca el empresario, quien señala que “la autocrítica constante no facilita tu crecimiento”, pero “ser más amable contigo mismo, hará que sea mucho más fácil ser la mejor versión de ti”.
Observación y análisis
Por su parte, Celia Antonini, escritora y psicóloga, indica que “el cerebro es el único órgano que puede verse a sí mismo y, por lo tanto, ver su actividad en el mismo momento en el que la está teniendo”. Por lo tanto, “podemos ver lo que estamos pensando en este momento y a la vez observar nuestra conducta.
Esto da la pauta para que la autocrítica sea positiva o negativa, ya que las personas pueden reconocer un error para encontrar maneras de resolver ciertas situaciones e incluso saber cómo actuar en escenarios similares.
Pero en la parte negativa, la autocrítica “tiene efectos destructivos y devastadores”, destaca la especialista, ya que las personas pueden sufrir ansiedad, angustia, ira, baja autoestima, abuso de sustancias, depresión y sentimientos de fracaso.
Este conjunto de emociones tiene un impacto en todos los sentidos; en el caso del trabajo, la productividad y motivación para efectuar las tareas es mucho menor. Adicionalmente, las personas tienen mayor miedo, sobre todo al fracaso y por eso evitan correr riesgos o salir de la zona de comodidad.
